El Gobierno buscaba modificar el convenio de trabajadores del Casino y, así, ratificar los despidos de principio de año. Sin embargo, el massista Guillermo Pereyra, integrante de Cambia Mendoza, se sumó al FpV y FIT, no bajó al recinto y no hubo quórum.
El diputado Guillermo Pereyra (Frente Renovador), aliado del Gobierno en la Cámara baja, decidió no dar quórum y la sesión en la que se iban a tratar los cambios en el convenio colectivo de trabajo del Instituto de Juegos y Casinos, se cayó.
Al igual que Pereyra, tampoco bajaron al recinto los diputados del Frente para la Victoria (FpV) ni del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT). Entonces, al tratarse de una sesión especial, al bloque oficialista no tuvo los números necesarios para dar quórum.
Paralelamente, hubo presión por parte de algunos intendentes peronistas para que algunos representantes en la Cámara de Diputados colaboren con el oficialismo bajando al recinto. Sin embargo, al menos durante el tratamiento del convenio de Casinos, éstos no accedieron.
Las modificaciones que buscaba aprobar el Gobierno iban a permitir ratificar los 80 despidos en el Instituto de Juegos y Casinos de principio de año.
Antes de irse, Francisco Pérez otorgó a los empleados temporarios y permanentes del Casino el beneficio de la estabilidad. Ahora, el oficialismo decidió eliminar las cláusulas que podían favorecer el reclamo de reincorporación de los 80 cesanteados a comienzos de 2016.
mdzol.com