En 2014 se espera que hasta diez empresas del IGBM no logren ganancias
Cuando se cierra una puerta se abre una ventana… Los largos años de crisis cerraron a cal y canto las posibilidades de muchas compañías de salir airosas de esta debacle. No obstante, los pequeños rayos de luz ya comienzan a filtrarse en el mercado español, que verá como en 2015 sólo un 5% de sus componentes registrará pérdidas. Esto supone volver a niveles precrisis.
Eso sí, el panorama tampoco está para tirar cohetes teniendo en cuenta que hasta un total de 23 miembros del IGBM ni siquiera cuenta con previsiones por parte del consenso. Además, las estimaciones para las ganancias del próximo año ya se han recortado un 13,2% desde enero.
En cualquier caso, cinco son las empresas sobre las que pesa la sombra de los resultados negativos en 2015: Codere, Cementos Portland, Amper, Natra y Uralita (esta última solo es seguida por un analista). Todas ellas han vivido o viven un proceso de reestructuración. En el caso de Codere, se esperan unas pérdidas de 92 millones de euros, casi un 20% menos que lo esperado este año.
El grupo de juego privado presentó el 2 de enero el preconcurso de acreedores, pero finalmente el pasado mes de septiembre se llegó a un acuerdo por el que la familia fundadora de la firma -Martínez Sampedro- cederá el control de la sociedad a los bonistas, que se harán con el 97,78%. Sin embargo, los mayores afectados serán los accionistas minoritarios que se quedarán con aproximadamente un 0,8 % del capital.
Además, una vez termine el proceso de reestructuración, se promoverá la exclusión de bolsa de la compañía. De hecho, desde que comenzó su andadura bursátil en 2008, sólo ha logrado cerrar un año con subidas. En el resto de ejercicios ha registrado una caída media superior al 45%.
¿Se tambalean los cimientos?
Más de un 90% se dispararon las pérdidas de Cementos Portland en los primeros nueves meses del año. La filial de FCC, fabricante de cemento, sigue buscando alternativas para refinanciar la deuda de casi 1.300 millones que soporta. Es más, la imposibilidad de hacer frente a su pasivo llevó a FCC a otorgarle un préstamo subordinado de 20 millones de euros para pagar una deuda de 50 millones de euros que tenía vencida desde julio. Además, queda por ver como les afectará la reestructuración de su matriz.
De momento, algunas de las medidas que se han tomado para redirigir el rumbo de la empresa han sido la reducción de salarios y de plantilla, la venta de plantas que no sean rentables en España y el incremento en la capacidad de las instalaciones de Túnez y Estados Unidos. De cara a 2015 los expertos esperan que recorte sus pérdidas un 26%, pero ascenderán a unos 36 millones de euros. Uno de sus principales problemas ha sido la gran dependencia del mercado español en unos ejercicios en los que el sector de la construcción se ha hundido. Es más, desde el 2012 su facturación nacional se ha situado por debajo del 50%.
Por otro lado, Amper y Natra también acompañan a estas firmas en la imposibilidad de conseguir beneficios, al menos para los analistas. La primera de ellas, dedicada al campo de las telecomunicaciones obtendrás pérdidas por valor de 19 millones de euros en 2015. Por su parte, Natra verá como sus pérdidas alcanzan los 3 millones si se cumplen las estimaciones.
eleconomista.es