Días atrás, fuentes de la Contraloría General de la República (CGR) adelantaron que el documento recomendará la cancelación del proceso actual y el inicio de uno nuevo. Solo se esperaba la vuelta del contralor Enrique García, quien refrendará el dictamen.
La auditoría hecha por la Contraloría, que fuera iniciada en noviembre del año pasado a raíz de las denuncias de tres empresas competidoras, constató irregularidades en el proceso, principalmente ocasionadas por las adendas hechas al pliego de bases y condiciones.
Es importante mencionar que la Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar) ya adjudicó el concurso a Daruma Sam, firma que explotaría en forma exclusiva las apuestas en todo el territorio nacional, por un período de cinco años. Asimismo, descalificó a la compañía Jockey Club del Paraguay, por no cumplir con las exigencias del pliego. Solo estas dos oferentes se presentaron a la apertura de sobres, de entre 18 empresas interesadas que adquirieron el derecho de participación. Para poder participar, cada una pagó G. 25 millones y el importe era no reembolsable, lo que quiere decir que la Conajzar recaudó G. 450 millones.
CUESTIONAMIENTOS. La principal objeción de las denunciantes tiene que ver con los requisitos que se introdujeron en el pliego y posterior adendas. Por ejemplo, las concursantes debían tener un patrimonio de G. 15.000 millones y constituir un fondo para premios. Como la única empresa que podía lograr esto era Daruma Sam, se menciónó que la licitación estaba direccionada. La Contraloría hace alusión a este punto.
Asimismo, la entidad contralora señaló que otro punto irregular tiene que ver con la presunción que hace la Conajzar para adecuar la explotación de las apuestas a una ley que todavía está en fase de proyecto. Desde la Contraloría aseveraron que se debe cumplir la ley vigente (aunque Conajzar tiene su propia legislación) y no poner un condicionamiento sobre una normativa que no se sabe si se aprobará.
Daruma Sam ya fue adjudicada por la Conajzar, pese a las objeciones de la CGR. Sin embargo, como todavía no se firmó el contrato (falta el decreto presidencial), el llamado aún puede ser cancelado.
DESAIRE. Cuando las empresas YEM S.A., Montego Trading S.A. y Enfield S.A. denunciaron las irregularidades ante la Contraloría, ésta recomendó suspender el proceso hasta que emita un dictamen sobre el caso. No obstante, días después la Conajzar hizo la apertura de sobres (en presencia de autoridades de la CGR) y luego de un mes resolvió otorgar la concesión a Daruma Sam, previa descalificación de Jockey Club.
El contralor Enrique García lamentó que nuevamente una institución estatal no haya respetado las atribuciones de la Contraloría y recalcó que las recomendaciones y dictámenes son de cumplimiento obligatorio.
Daruma Sam ofreció un canon del 21%.
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